La citología es una prueba ginecológica fundamental en la vida de las mujeres, entre los 21 y los 65 años. Sin embargo, a menudo se sigue posponiendo, en ocasiones debido al miedo a recibir un resultado positivo, por las molestias que puede ocasionar e incluso por pereza.
Para conocer al detalle todo lo relacionado con la citología, os explicamos en nuestro blog cómo se realiza, a qué edad se aconseja y cuál es el objetivo de esta prueba. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la citología y cómo se realiza?
La citología es una prueba ginecológica que realizamos en las revisiones de Ginecología para detectar de forma precoz el cáncer de cuello de útero o cérvix. La citología, también conocida como test de Papanicolau, permite recoger una muestra de las células del cuello uterino para, después, analizarlas con un microscopio.
Citología vaginal, paso a paso
Esta prueba consiste en una técnica muy fácil y rápida:
- En primer lugar, se coloca el espéculo en la vagina para mantener separadas las paredes vaginales, lo que nos facilita la visión del cuello uterino.
- A continuación, se introduce un cepillo y una espátula para la recogida de la muestra.
- En tercer lugar, se realiza un frotis por diversas zonas, como las paredes de la vagina, el canal endocervical y la parte externa del cuello uterino. De esta manera, se obtiene la muestra de las células.
- Finalmente, se guardan las muestras extraídas adecuadamente para, posteriormente, poder estudiar si existe cualquier anomalía en ellas o no, que pudieran ser indicativo de alguna enfermedad.
¿Qué tanta importancia tiene la citología?
Esta prueba permite detectar la presencia de células anómalas en el cuello del útero, por lo que resulta esencial en la salud de las mujeres. De esta forma, en el caso de resultar positiva, podríamos comenzar cuanto antes con los tratamientos más adecuados.
En particular, la citología permite detectar enfermedades como:
- Cáncer de cuello uterino.
- Lesiones premalignas.
- Alteraciones originadas por el papiloma humano o VPH.
- Infecciones vaginales provocadas por hongos, bacterias y parásitos.
- Trastornos de las células vaginales a causa de la menopausia.
Edad a la que se recomienda acudir
Todas las mujeres entre los 21 y 65 años deben realizarse la citología, a excepción de aquellas que no han mantenido relaciones sexuales. En ese caso, no es necesario realizar la citología, ya que su riesgo de desarrollar el cáncer uterino es casi nulo. Hay que tener en cuenta que más del 90% de estos cánceres están originados por la infección del papiloma humano o VPH, que se transmite a través de la práctica sexual.
¿Citología anual o cada tres años?
En general, se debe repetir cada tres años hasta los 30 años. A partir de entonces, se recomienda incorporar además la prueba del VPH para obtener una mejor detección.
Sin embargo, existen casos en los que aconsejamos repetir la citología una vez al año, especialmente:
- Cuando en la anterior citología el resultado ha sido positivo.
- Cuando se detectan verrugas genitales provocadas por el papiloma humano.
- Cuando existen antecedentes de una enfermedad de transmisión sexual o ETS.
- Cuando se mantiene una vida sexual muy activa.
¿Duele la citología?
Esta es una de las preocupaciones más habituales en la consulta que es importante aclarar. La citología no es una prueba dolorosa, pero sí puede causar cierta incomodidad y sensación de molestia.
Igualmente, la citología vaginal es una prueba segura. El único efecto secundario posible es que puede provocar leves sangrados, aunque ocurre con muy poca frecuencia.
Por todo ello, es vital perder el miedo a la prueba de Papanicolau, que además se realiza en pocos minutos y, a cambio, nos ofrece una información muy relevante para tratar enfermedades que podrían resultar muy graves si no reciben el tratamiento adecuado.
Recomendaciones de Ginefem antes de la prueba ginecológica
Para evitar resultados alterados en la citología, aconsejamos:
1.No acudir con la menstruación, ya que esto podría afectar a la interpretación de la muestra recogida.
2.Esperar a que hayan transcurrido cinco días desde que finalizó la menstruación.
3.Evitar las relaciones sexuales durante los dos días previos a la prueba.
4.Descartar los lavados internos de la zona vaginal.
5.No utilizar óvulos, cremas o espermicidas los días anteriores al test.
¿Te toca realizarte tu prueba ginecológica? ¡Llámanos al 922 241 598!
