Una de cada diez mujeres españolas en edad reproductiva sufre endometriosis, una patología que va mucho más allá del dolor menstrual.
La endometriosis aparece cuando el endometrio crece y se extiende por la zona pélvica provocando placas y quistes. Su diagnostico suele ser tardío, es decir, durante los 30-50 años, aunque siempre dependerá de cada mujer.
Cuando es detectada a edades avanzadas una de las formas de eliminar la endometriosis es eliminando el útero. Esto se realiza en mujeres que tienen más de 50 años, cerca de la menopausia y no quieren tener más hijos.
Hay pacientes en las que la menopausia provoca la desaparición de la endometriosis. Pero suele ser en aquellas con una endometriosis leve y cuyos síntomas son menores.
Las claves para entender la endometriosis
Se trata de una enfermedad benigna cuya causa aun se desconoce. Aun así, los expertos hablan de posibles factores genéticos y ambientales involucrados en su desarrollo.
Además, es una enfermedad que puede provocar problemas a la hora de quedarse embarazada. Esto se debe a que quienes padecen esta patologia tienen el abdomen más hinchado y el esperma tiene problemas para llegar al óvulo y fecundarlo. Esto no significa que la mujer sea estéril, sino que complica el hecho de quedarse embarazado.
Síntomas de la endometriosis
Esta patología tiene síntomas muy característicos como:
- Dolor muy agudo durante la menstruación provocado por contracciones uterinas.
- Pérdidas intermenstruales
- Reglas muy abundantes
- Menstruaciones irregulares
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Dolor al orinar
- Fatiga
- Cansancio
Aun así hay ciertos casos en los que la endometriosis es asintomática y se diagnostica cuando la paciente acude la consulta con problemas para quedarse embarazada.
¿Se puede curar la endometriosis?
Cada mujer va a requerir un tratamiento determinado para la endometriosis. Por lo general, empiezan con un tratamiento anticonceptivo o antinflamatorio que alivia el dolor.
Si se encuentra en fases avanzadas será necesario recurrir a una cirugía laparoscópica que logra eliminar los focos donde se encuentra. Sin embargo, puede volver a aparecer.
La última opción es realizar una histerectomía, pero esto solo ocurre en casos puntuales.